Temen padres por la integridad de los seis alumnos de la UAG arraigados por la PGR

Redacción

Chilpancingo

Padres de familia de los seis estudiantes de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), arraigados en la ciudad de México, temen por la integridad física de sus hijos, tras llamadas telefónicas de los jóvenes que suplican que los visiten, pero por falta de recursos económicos no han podido acudir.
Los jóvenes detenidos por la Policía Federal el 13 de septiembre fueron trasladados a la ciudad de México el 17 del mismo mes, y hasta ayer los padres sólo los han podido visitar un par de veces, y los acercamientos son muy cortos, dijo Jesús Alarcón Juárez, padre de Alan Francisco Alarcón García, uno de los detenidos.
Los estudiantes del tercer semestre de la Unidad Académica de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UAG llamaron por teléfono a sus padres para “suplicar” que acudan a la casa de arraigo donde están Jesús Antonio Moreno Román, Juan Andraca Escalante, Lucio Sandoval Molina, José Luis Dealmonte Díaz, Alan Francisco Alarcón García y Ricardo Muñoz Arzate, comentó el padre de familia.
Explicó que el jueves 27 fue el último día que pudieron visitar a sus hijos, a quienes encontraron más temerosos que en ocasiones anteriores, pero como las visitas en el centro de arraigo son muy cortas, no pudieron platicar de qué los tiene tan intimidados.
“Nos urge verlos, todos los padres de familia nos quedamos muy preocupados, no sabemos qué les pasó, si los están torturando, que les están diciendo o haciendo”, dijo Jesús Alarcón.
Informó que los padres de familia se reunieron la tarde del domingo, y que la preocupación es general, porque todos coincidieron en que los estudiantes están muy desesperados, pero que por seguridad no pueden decir mucho por teléfono y sólo pidieron a sus padres que acudieran a verlos.
A pesar de que el gobierno del estado los está apoyando económicamente para ir a la ciudad de México con el abogado que lleva el caso y visitar a los universitarios, tienen que pedir el dinero con anticipación, y por eso, después de las llamadas por teléfono del viernes y sábado, no pudieron acudir a ver a sus hijos.
La petición es la misma, dijo el padre de familia, que los estudiantes sean trasladados a Guerrero y que se esclarezca cómo fue la detención, porque hasta la fecha no se ha tomado la declaración de los estudiantes para que ellos puedan explicar cómo los detuvieron y en qué momento les sembraron las armas y la droga, comentó.
Agregó que hasta el momento sólo ha declarado ante la PGR un testigo de la detención en Ciudad Altamirano, quien dijo que la detención fue irregular porque, según lo que el testigo observó y declaró, al momento de revisar el vehículo no les encontraron las armas ni la droga que la Policía Federal y la Procuraduría General de la República (PGR) señalan.
Solicitó también al diputado federal Catalino Duarte Ortuño, que presente las pruebas que tiene, de que una de armas que les fueron sembradas a los estudiantes fue robada por la Policía Federal en un domicilio de Ciudad Altamirano.