MIÉRCOLES, 19 DE DICIEMBRE DE 2012

Por Victor Hernández

El Senado acordó elegir a los nuevos comisionados del IFAI partiendo de una consulta ciudadana.

Sí; tal y como hizo Andrés Manuel López Obrador con los segundos pisos, con su permanencia en el cargo, y como hizo Marcelo Ebrard con la reforma energética.

El procedimiento, de acuerdo con Reforma, consistirá en hacer una consulta ciudadana organizada por el Senado para elegir a los finalistas para los cargos de comisionado del IFAI.

Los finalistas, luego de eso, serán sometidos a consideración por el Senado. Para elegirlos se requerirá de dos terceras partes de la votación. Es decir, 85 votos.

Luego de eso, el titular del ejecutivo federal podrá aprobar o rechazar a los comisionados elegidos por el Senado. Si los rechaza, se tendrá que hacer una nueva consulta ciudadana, y votar nuevamente en el Senado, pero esta vez sólo se requerirán 3 quintas partes del Senado, o 77 votos.

Luego el titular del Ejecutivo podrá rechazar o aprobar a los seleccionados por el Senado. Si los rechaza, se tendrá que hacer una tercera consula y otra vez ratificación por el Senado con 77 votos. Pero luego de este tercer proceso, el titular del Ejecutivo no podrá rechazar a los comisionados ratificados por el Senado.

El presidente del IFAI será electo por voto secreto de los 7 comisionados ratificados por el Senado.

Interesante esto que está haciendo el Senado. Lo mismo quiere hacer con los consejeros del Instituto Nacional de Evaluación para la Educación; que sea el Senado el que los ratifique y que sea entre los consejeros que se elija al presidente.

Es decir, están viendo la manera de quitarle la mayor cantidad posible de poder a Enrique Peña Nieto.

Lo cual me parece muy bien.

Porque si el presidente fuera Andrés Manuel López Obrador, se estaría sometiendo a consulta ciudadana hasta su permanencia en el cargo.

Lo curioso es que el acuerdo para el IFAI fue hecho entre el PAN, PRD y PRI. PAN y PRI, cabe recordar, siempre atacaron a AMLO por hacer consultas en el DF.

Ahora, en los hechos, el PAN y el PRI están admitiendo que AMLO tenía razón.